Nos encontramos ante una novela larga (por lo obvio) y densa, que a pesar de ser así mantendrá la atención y tensión del lector. Desesperación es un pueblo minero más desierto de lo que aparenta en un primer momento... y es que algo malvado ha surgido de lo más profundo de sus tierras y está dispuesto hacer lo que se para salirse con al suya. El cuerpo de un policía local le servirá para ello, así como los rehenes que posee, que no son más que un escritor, una madre y su hijo, unas amigas,... gente de a pie, a simple vista, sencilla y sin nada especial. Pero... ¿es así?. "Charlas con Dios", un infiltrado, persecución, crueldad, y mucha mucha angustia seran varios de los elementos que encontraremos en este libro.
He de decir que fue uno de los primeros libros que leí de Stephen King y me quedé satisfecha. Quizás me esperaba otra cosa, no se... En mi ponión le sobraron algunas páginas pero aún así no me puedo quejar, cumplió su objetivo en cuanto a entretenerme y engancharme. Es bastante cruel y macabro (aunque vienen a mi mente otro títulos que me han marcado más), pero ojo con esto si sufres de estómago, y aparecen personajes que pueden sonarte si has leído Posesión, otra de las obras de este autor. A título personal... ¡me encanta la portada!
La lucha por la supervivencia, temática tan usada últimamente pero que no deja de gustarme por ello (siempre me ha encantado, tanto en los libros como en el cine, el rollo "survive"), estará presente a lo largo de todo el libro, esa lucha "entre el bien y el mal" también, y mascarás la angustia, la desesperación, de los personajes en la huída trepidante de ese pueblo del demonio.
A pesar de que guardo un grato recuerdo y creo que tanto los personajes como la historia y la forma en la que está contado todo es estupenda, mi puntuación será de un 3, ya que este libro me dejó esa sensación de "si varias cosas hubiesen sido distintas me hubiera gustado más" (me explico que da gusto, nótese la ironía, espero que me entendáis mínimamente ^^U). Aún así, si eres de los que gustan de un buen libro de terror con el que asustarte, acelerarte, desesperarte y aguantas bien posibles (y más que probables) escenas fuertecillas (cruelmente hablando, aunque como repito, en mi caso recuerdo otras peores), te animo a que le des una oportunidad, ya que es un libro que tiene su tiempo y podemos leer a Stephen King como quizás ahora no, valorarlo de otra forma y encontrar en sus páginas elementos que pueden haber desaparecido en sus obras más actuales.